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Rosario de la Armada de la Virgen María

Rosario de la Armada de la Virgen María (El Rosario que el demonio quiso impedir que ustedes conocieran) 

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La Virgen nos dice: “Si intensifican el rezo del Rosario, intercederé para aminorar cuanto se avecina.” 

El Rosario aumenta el Escudo Protector.

El demonio es atormentado por cada Avemaría que ustedes dicen con fe y amor.  ¿Cuándo vamos a responder a Nuestra Madre que nos dice que la oración nos nutre, que el pecado atrae más dolor y que sin Dios no nos vamos a salvar? Reaccionemos, hoy, no mañana.  El espectro de la guerra se levanta con prontitud     Un llamado a toda la humanidad a todos los hombres de buena voluntad desde Europa a Oriente, de América del Norte al Centro y Sudamérica. Acatemos este llamado doloroso y urgente del cielo, estamos a la vísperas de las mas terribles pruebas que la humanidad vivirá. Os invitamos y rogamos a todos los grupos espirituales, responder al llamado de nuestra Madre Santísima en una cadena de oración mundial para mitigar el curso de cuanto ya esta en marcha para la humanidad, dedicad un momento del día, organizad según vuestra disponibilidad en grupos o de forma individual, reflexionad y tomad conciencia de este pedido especial. Cuando el amor es desterrado, el hombre cae en sus más bajos instintos; cuando el amor es desterrado, el hombre queda a merced de Satanás, es esta la razón por la cual hoy una vez más les llamo a no permitir que el AMOR se aleje del ser de cada uno de ustedes; el amor a Dios y al prójimo debe prevalecer hoy más que en otro momento, porque Satanás ha preparado sus legiones para actuar en contra de la humanidad, con engaños. Hijitos: acérquense al Sacramento de la Reconciliación, acérquense al alimento Eucarístico, para que la fe no decaiga sino sea robustecida; acérquense a esta Madre que les ama, pidan la protección de sus compañeros los Ángeles, pidan la intercesión de los Santos.  Invoquen constantemente el SANTO NOMBRE DE DIOS; vivan una verdadera vida en comunión con Mi Hijo, para que el enemigo no les haga presa fácil. Invoquen el NOMBRE DE DIOS, y aliméntense del Pan Eucarístico; nútranse del Cuerpo y la Sangre de Mi Hijo, que así no tambalearán. Permanezcan firmes en la fe y oren continuamente. La vida de cada uno de ustedes debe ser oración, no sólo personal sino por sus semejantes, por aquellos que pronto sufrirán los embates de la naturaleza, por aquellos que se entregan en manos del mal. Ustedes, hijos, que viven intercediendo por sus hermanos no declinen la oración, auméntenla con cadenas mundiales del Santo Rosario, para que este clamor suba hasta el Trono de la Santísima Trinidad y repare las ofensas que comete el hombre contra su Creador.


 Debemos rezar unos por otros. 


Nos dice la Virgen: No ignoren mis llamados, la cercanía de cuanto les comparto es más de cuanto puedan imaginar, acérquense al sacramento de la reconciliación, debidamente preparados espiritualmente, y dignamente vestidos. Mi manto les cubre, no lo dejen de lado, protéjanse con él. Algunos de Mis hijos niegan los llamados del Cielo: niegan el Aviso, el Castigo y el Milagro, niegan la tiniebla que envolverá a la humanidad. Estos hijos, ciegos espiritualmente, son amados por esta Madre Peregrina de Amor. Han confundido misericordia con libertinaje. El hombre mendiga un amor equivocado, ignorando a Dios, siendo de esta manera desconocido para el Cosmos, el cual se estremece ante la dureza humana, que no atiende los llamados del Cielo.
  “Estos son los llamados del Cielo”Todo lo anunciado ya está comenzando   Muchos de Mis hijos se mantienen en un estado de nerviosismo ante las revelaciones. No alertamos con esta finalidad (de alarmarlos), sino para que se preparen espiritualmente, plenamente confiados en la Divina Misericordia, yo nunca desampararé a los míos. Estaré con mi Hijo al frente de la Iglesia, por siempre.Como madre y maestra les urjo a vivir más plenamente el Evangelio, les apremio a entregarse más y más a la casa paterna, les urjo a vitalizar mediante la oración las fuerzas, ya que el instante venidero es: 
Caótico.
 
  
 Hijitos: el maligno labra su aparición y antes de este hecho, lucha por llevar al hombre hacia la hecatombe y a la lucha entre los pueblos. El maligno lucha contra la Iglesia de Mi Hijo, lucha contra los hijos de la Mujer Vestida de Sol. 
 Antes de esto el HOMBRE SERÁ PURIFICADO una y otra vez. La humanidad sufrirá. Los elementos se volverán contra la humanidad. Lo que antes sirvió al hombre, se torna contra él. La tierra vierte su fuerza y ésta hace llorar al hombre que sufrirá muy pronto.

El agua flagelará nuevamente al hombre, el aire llevará la peste con gran prontitud por toda la tierra, el fuego saldrá en uno y otro país, la tierra se estremecerá muy pronto. 

Hijos, serán flagelados reiteradamente. ¡Cuánto sufro por ello! Los poderosos traerán dolor, en su afán de apoderarse de la humanidad. 

 Oren a San Miguel, San Gabriel, San Rafael y al Ángel de la Guarda, pídanles protección No duden del auxilio del Padre por los suyos.  No transitan solos, su Madre Peregrina les trae el arma para que venzan: El Rosario Sufro por Mis hijos, sufro por los que no creen en Mis llamados.  Cuanto quisiera Mi amor de Madre presentarles un panorama diferente al que tengo que transmitirles a ustedes hijos amados. Es urgente tomar conciencia de acontecimientos venideros. En la oración, no olviden en sus intenciones, a aquellos países por los cuales Mi Hijo y Yo hemos solicitado orar  ( por todos los que aparecen en el cuadro). Y no olviden rezar el Credo en momentos de tentación.

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